Nuevos aires (Audrey)

Recuerdo del primer mensaje :

El viento soplaba con sutileza por las calles de Nueva York, ciudad terriblemente contaminada y llena de gente atareada que no se daba cuenta de todo lo que a su alrededor pasaba. El olor a demonio en esta ciudad era algo que solía sobreponia a los miles de humores que tanto humano despedía por ahí... aunque ellos, esos mundanos corrientes ni siquiera parecían percatarse de lo peligrosa que era su ciudad. Sin embargo al menos hoy el olor a demonio estaba demasiado atenuado, punto uno quizá por la batalla de la noche anterior y el portal que contenía a esos demonios roto temporalmente no podían hacer mucho ahora, pero sabía que quien fuera que los manejaba no se quedaría quieto aún pues por algo andaba trayendo demonios, aunque la mayoría eran de baja denominación. Pero bueno, un nefillim también tiene días en los que parece que no hay nada bueno que hacer y para mi suerte después de una batalla genial el día anterior hoy no tenía mi radar indicando malignidad ni algún plan. Era la verdad un tipo aburrido sin vida, pero... es que no conocía otra vida que no fuera luchar.

Estaba a unas calles de Taki's y pensaba seriamente en ir a comer algo, a fin de cuentas amaba comer y ya empezaba a ser hora de poder cenar... cenar parte uno quiza, pero era hora según yo. Iba por la calle con un glamour para no andar chocandome con mundanos estorbozos, aunque no llevaba mi ropa de batalla, sino un conjunto sencillo, el pelo alborotado y lentes obscuros... como si desvelado estuviera y quisiera ocultarlo... pero la verdad... me gustaba más usarlos, que otro motivo oculto.

Termine mi plato y me sentí satisfecho, saciado y feliz, esa sensación tan rica que da después de comer cuando uno tenía mucha hambre. Pase el plato a la orilla de la mesa, y luego limpie la lata del refresco con cuidado para después abrirla -No importa, lo que es interesante es que justo nos encontraramos aca... me parece medio caprichoso pero bueno el mundo es un pañuelo ¿cierto?- le dije mientras llevaba la lata a mis labios y tomaba por fin un poco, no me gustaba tomar agua antes de comer o con la comida por que solo te hacia panza y te llenabas de agua y no era sano.

U: Yo no critiqué a nadie, solo compartí algo... :p


Me reí notando que ella parecía evadir mi pregunta... bebí un tanto más del refresco con tranquilidad y luego deje la lata de nuevo en la mesa -Por nada, aunque quizá y si tienes suerte te invite algo más rico en esta ciudad... Taki's no es malo, pero tampoco el único como te hacen creer cuando llegas- le dije mientras me estiraba un poco en mi lugar y miraba a la chica sin disimulo y con interés -Sabes te ha sentado bien los años, luces distinta, pero muy guapa- estaba siendo honesto y esperaba que no me lo tomará para chiste o algo así, pero no se me ocurría mucho como para abordar cuando ella me evadía preguntas.

Me reí y negué -La ropa me hace parecer más interesante pero en cambio, tú si que te ves muy guapa... en serio, lo que se que hagas ahora sigue haciendolo te sienta bien- le dije mientras me levantaba y comenzaba a recoger todo. Había notado que se había sonrojado, y por una razón que seguía sin entender yo no quería que se sintiera incómoda conmigo ni parecido, quizá por eso quería desviar la atención o algo así -Oye Audrey... ¿y por qué ibas a cenar sola?- se me salió preguntar y dude si eso era igual de metido que lo otro y me quedaría sin otra respuesta más.

Levanté los hombros y baje de nuevo las escaleritas para luego ir a la improvisada cocina y tirar la basura en un botecito que tenía por ahí escondido, era evidente que usaba ese cuartel más que pocas veces -La verdad no lo recuerdo... no pongo gran atención cuando me quitan mis cigarros- le comenté con cierto dejo de ironía mientras volvía a subir a donde estaba ella para, hablar ¿de frente?

Cuando llegué a la cima la miré negando y entrecerrando los ojos -Dime que bromeas por favor... esa cigarrera... no importa, no entenderías- le dije mientras intentaba disimular mi enfado pero no podía pues mi mirada no lo encubría y menos aún el hecho de que chasqueaba los dedos para resistirme a hacerle algo a Audrey, ella no tenía porque entender lo que un vicio podía significar ni porque lo tendría una persona... fuera un vicio feo o bonito, los vicios suplían cosas buenas o malas pero estaban para llenar vacíos o justificar cosas... o sencillamente darte bienestar algo así entendía yo... Tomé aire y me mordí el labio... no lograba controlarme, no sabía si saltar sobre la chica y causarle daño para vengarme o algo así, o salir corriendo a buscar la cigarrera por la calle.

La miré y negué -Te da igual, como no es bueno para ti... crees que por ende es malo para el mundo y según tú eso es lo mejor- acabe por decir y me volví a bajar por la escalera. Camine hacia la puerta y la abrí haciendo más ruido del que hiciera al principio antes de entrar, pues esta vez no fui cuidadoso con la pobre puerta -Pero no te detienes a pensar en lo que puede ser para los demás... gracias por nada- le dije y me salí, tenía que irme porque me sentía realmente enojado, no sabía del todo que era lo que me enojaba más... si que dijera lo que decía con tanto cinismo, la acción o que quisiera jugar con algo que yo no podía jugar.

La miré y levanté los hombros -¿Por qué debería preocuparme por ti?- le pregunté con indiferencia y antes de que estuviera junto a mi me adelante a caminar hacia el otro lado del pasillo, se veía una ventana a lo léjos y me iba hacia ella. Llegué ahí y abrí la misma para sentarme en el borde, pase un pie a un lado y deje el otro adentro -Por mi haz lo que quieras, olvide por un momento que no somos nada como para que tuvieras alguna consideración para conmigo...- y por eso yo no creía necesario tener ninguna con ella, bueno entre comillas pero eso no se lo iba a decir directamente.

Sentí cada movimiento de ella, cuando dejo la cigarrera giré levemente el rostro y la miré meterse al ascensor, tomé la cigarrera y acto seguido me tiré por la ventana, no era un suicidio en absoluto... solo salte a la escalera de emergencia y baje a saltos y como chango en realidad... no tarde demasiado en estar en la planta baja, y ahi una vez me fui a la puerta de entrada... volví a introducirme en el edificio y me detuve a ver el elevador, como era algo viejo, no era tan veloz y vi como iba moviendose de piso en piso aun, iba por el 5 y suspiré aliviado porque eso quería decir que alcanzaría a Audrey aunque ¿para qué la quería alcanzar si no la quería en mi vida? ¿o era que la quería? el elevador cambio del 4 al 3 de nuevo mientras yo seguía mirando y luego al 2... era cuestión de nada para que se abrieran esas puertas... y ahora ¿qué iba a decirle? asi como ella me había hecho pasar un mal rato, algo me decía que me había pasado con mis palabras pero... ¿de verdad me importaba la chica?... 1... y unos segundos más y diría planta baja...

El plan no me había salido al 100% como en mi cabeza se formo cuando me había lanzado a bajar como desquiciado tras ella, pero tenía aún tiempo y chance de actuar. Cuando el elevador se abrió ella bajo más rápido de lo que espere, aunque a ser honestos yo me había quedando dudando de hacer lo que quería hacer, pues no estaba seguro si aquello era normal, lógico y adecuado... aunque cuando vi que se iba por segunda vez apague mis pensamientos y me giré con rapidez para tomar el brazo de Audrey y detenerla -Por favor no te vayas así... no somos nada, sí... pero muero y suplico por que eso cambie...- y quizá las palabras no me salieron como yo quería mi idea era decirle quiero que seamos algo, o todo o algo mejor... pero ya no quería añadir más pues... bueno me vería tonto, al menos eso creía.

Sentir sus ojos taladrando en mi interior me puso nervioso, uno conoce siempre sus debilidades y la mía, la que menos soportaba era justo el punto que ella había afrontado, yo sabía lo transparente que resultaba mi mirada lo honesta que era y lo facíl que podía resultarle a cualquiera leerme si leía en mis ojos... era lo único de mi que no sabía mentir, que no sabía actuar y que me hacía seguir siendo Demian el chico honesto y real y no el que yo quería aparentar ser... Sentía de cierta forma como mis ojos temblaban y abrí la boca para suspirar y asentir -No estoy seguro en que sentido pero...- y en ese momento la solté, me parecía que estaba actuando como un tarado y no sabía ni bien porque me estaba llevando a mi mismo a esos limites -...me gustaría averiguarlo- no le iba a decir más, no podía abrirme como libro viejo frente a ella y confesarle que siempre me había sentido magnetizado hacia su persona, que de mis compañeros del instituto solo ella me había llegado a importar y que hasta antes de ese día llegaba cierto momento de mis días que ella paseaba en mis pensamientos y me preguntaba que sería de ella, porque no quería que supiera que justo ella al salvarme la vida había pasado a significar algo más para mi... pues esa confesión solo yo la conocía, yo y nadie más.

Nada de lo que yo esperaba me salía como quería con ella, nunca... siempre todo se me iba a caminos tan raros que yo ni lo entendía o no quería entenderlo. La miré y enchuequé una disimulada sonrisa que solo podía reflejar decepción... ¿por qué tenía que ser tan dura esa niña? ¿por qué no sencillamente aceptaba y ya? -No te preocupes por eso, yo no supe... controlarme...- dije la última palabra con dificultad mientras la miraba y asentía algo triste porque al parecer yo era el único ahí presente que estaba pensando en otras cosas, y para ella era como un viejo conocido... un amigo no creía y algo más mucho menos -Me portare bien, pero ¿te vas a ir ahora?-

Estaba a punto de no se que hacer, o decir cuando ella acabo por hacerme reír aun cuando no quería, asentí a su petición y otra vez antes de que pudiera decir más nada ya me tomaba de la mano e ibamos a caminar a la inmensidad de la ciudad -¿Postre?- le pregunté como si jamás hubiera escuchado la palabra y camine sin soltarla, de hecho busque con cierto 'interes' que sus dedos se entrelazaran con los míos... ya no sabía porque actuaba como actuaba con ella pero no me iba a andar arrepintiendo -Pensé que no tendrías hambre para nada más, de saberlo lo hubiera comprado antes- porque me sentía levemente apenado por dejar en falta el dichoso postre.

Me reí y asentí -¿El postre siempre debe ser dulce?- eso era una duda que acababa de formarse, rara pero no la podía mantener ya más conmigo porque la culpable de ella era Audrey. Seguimos caminando y luego me reí de nuevo mientras negaba -No, no... es que bueno, no estoy generalizando ni diciendo que seas así pero últimamente es raro encontrar chicas que quieran postre, siempre con sus ensaladas y agua y no sé... no te conozcó mucho para adivinar tus gustos en comida, verdad- ok estaba poniendome nervioso por lo cuál estaba hablando mucho, rápido y sin estar del todo consciente de lo que decía era bueno o malo, o al menos entendible, pero esperaba y confiaba mucho mucho que Audrey lo entendiera, y pudieramos llegar a platicar bien, porque aunque seguiamos juntos... nuestra platica no salía tan buena como me gustaría.